4 pechugas de pollo deshuesadas (si son muy grandes cortalas por la mitad)
4 lonjas de jamón
4 tomates
1 sobre de queso rallado estilo parmesano
aceite, sal y pimienta
Para el adobo:
4 cucharadas de aceite
2 cucharadas de zumo de limón
1 cebolla
1 diente de ajo, perejil y pimienta
Preparación:
Aplasta las pechugas con la mano de mortero y ponlas a macerar con los ingredientes del adobo durante unas horas.
Escúrrelas y sazónalas con sal y pimienta; dóralas por ambos lados en aceite, retíralas y ponlas en una fuente de horno.
Coloca encima de cada una de ellas una lonja de jamón y un tomate cortado en rodajas; espolvoréalas con el queso rallado y tratínalas unos minutos a horno fuerte.